Quiero empezar esta sección introduciendo y clarificando que son las Necesidades Específicas de Apoyo Educativo, un concepto que engloba, a su vez, muchos conceptos, retos y oportunidades, y que considero esencial clarificar antes de abordarlas.
En el camino hacia una educación verdaderamente inclusiva, la identificación temprana de las barreras de acceso, aprendizaje y participación es clave para garantizar que todos los estudiantes reciban el apoyo que necesitan. La educación inclusiva supone un cambio de paradigma en el que se deja de poner el foco en las "dificultades" del alumnado para centrar la mirada en las barreras que el propio contexto impone. Se trata de reconocer que todos los niños aprenden de manera diferente y que es la escuela la que debe adaptarse a esa diversidad, eliminando obstáculos y facilitando el acceso a la educación en igualdad de condiciones.
Para que este modelo de escuela inclusiva sea una realidad, es imprescindible que el profesorado diseñe la enseñanza teniendo en cuenta la diversidad desde el inicio. Aquí es donde cobra especial importancia el Diseño Universal para el Aprendizaje (DUA). Este enfoque plantea la necesidad de ofrecer múltiples formas de representación, expresión y compromiso, asegurando que todo el alumnado, con independencia de sus características o necesidades, pueda aprender y participar activamente en su proceso educativo.
El sistema educativo reconoce que hay alumnos que requieren medidas específicas de apoyo educativo, y en la Comunidad Valenciana, la plataforma Ítaca 3 clasifica estas necesidades bajo el término Necesidades Específicas de Apoyo Educativo (NEAE). Esta clasificación permite que los centros educativos puedan planificar y personalizar las intervenciones necesarias, garantizando la equidad y la atención a la diversidad.
📝 Clasificación de las NEAE
1. Necesidades Educativas Especiales (NEE)
✔ Discapacidad auditiva
✔ Discapacidad visual
✔ Discapacidad motriz
✔ Discapacidad intelectual
✔ Retraso global del desarrollo
✔ Trastornos del Espectro del Autismo (TEA)
✔ Otros trastornos del desarrollo neurológico
✔ Trastornos graves de conducta
✔ Trastornos mentales graves
2. Dificultades en comunicación, lenguaje y habla
3. Dificultades específicas de aprendizaje (DEA)
✔ Dificultades en la lectura (dislexia)
✔ Dificultades en la escritura (disgrafía/disortografía)
✔ Dificultades en las matemáticas (discalculia)
4. Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad (TDAH)
5. Altas Capacidades Intelectuales (AACC)
6. Condiciones personales e historia escolar
7. Incorporación tardía al sistema educativo valenciano
¿Por qué es importante esta clasificación?
La identificación de las NEAE permite:
🔹 Personalizar el aprendizaje, adaptando el currículo y los métodos de enseñanza.
🔹 Implementar medidas de apoyo, como refuerzos educativos, intervención especializada y adaptaciones metodológicas y tecnológicas.
🔹 Garantizar la equidad, proporcionando a cada alumno lo que realmente necesita para su desarrollo.
🔹 Planificar la enseñanza desde un enfoque inclusivo, aplicando principios del Diseño Universal para el Aprendizaje (DUA) para anticiparse a las posibles barreras en el aula.
Los retos de la escuela inclusiva
No puedo acabar este introducción sin hablar de las dificultades que se viven y los grandes retos que tenemos en las escuelas y la sociedad para hacer realidad la inclusión.
Si bien la educación inclusiva está reconocida como un derecho y un objetivo fundamental en nuestro sistema educativo, hacerla realidad en el día a día de nuestras aulas sigue siendo un reto. No basta con reconocer la diversidad, es necesario que la escuela se transforme estructural y metodológicamente para garantizar que todos los alumnos, con independencia de sus características, puedan aprender, participar y sentirse parte de la comunidad educativa.
Uno de los grandes desafíos es superar las barreras que aún existen en los centros escolares:
🔹 La falta de recursos y apoyos especializados.
🔹 La rigidez de algunas metodologías de enseñanza.
🔹 La dificultad para coordinarse con los diferentes agentes que intervienen en la vida de un alumno.
Para lograr una escuela realmente inclusiva, es fundamental que el trabajo no recaiga exclusivamente en los docentes, sino que se construya de manera conjunta con las familias y los profesionales externos. La colaboración con logopedas, terapeutas ocupacionales, especialistas en integración sensorial y otros profesionales es clave para diseñar estrategias que favorezcan el desarrollo del alumnado con NEAE.
Asimismo, abrir las puertas de los centros educativos a nuevos programas y recursos puede ser una gran oportunidad. El voluntariado educativo, la participación de asociaciones y la implicación activa de las familias pueden enriquecer enormemente la vida escolar y favorecer la inclusión real de todos los niños y niñas.
El reto está en transformar nuestras aulas en espacios flexibles, accesibles y colaborativos, donde cada alumno pueda encontrar su lugar y desarrollar su máximo potencial. La inclusión no es solo un objetivo, sino un camino que debemos recorrer juntos.
La dislexia es una dificultad específica del aprendizaje de base neurobiológica que afecta a la lectura, la escritura y la ortografía. No está relacionada con la inteligencia, sino con la forma en que el cerebro procesa la información escrita.
Las personas con dislexia tienen dificultades para reconocer palabras con precisión, automatizar la lectura y comprender el texto escrito, lo que puede afectar su desempeño escolar y su autoestima si no se interviene adecuadamente.
Principales dificultades en la dislexia
Es importante destacar que no todas las personas con dislexia presentan las mismas dificultades. Cada niño es único, y dentro de la dislexia pueden existir distintos perfiles, con manifestaciones que varían en intensidad y características. No es necesario cumplir con todos estos puntos para que exista dislexia, pero algunas de las dificultades más comunes incluyen:
🔹 Dificultades en la decodificación de palabras: les cuesta asociar letras con sus sonidos y reconocer palabras con rapidez.
🔹 Dificultades en el acceso al léxico: pueden tener problemas para encontrar la palabra exacta que quieren decir o escribir, aunque la conozcan y la tengan en su vocabulario, optando por decir palabras más comunes "cosa" en vez de "lápiz".
🔹 Confusión entre grafías similares: pueden confundir letras como "b" y "d", "p" y "q", o "m" y "n".
🔹 Problemas con la comprensión lectora: leer de manera lenta y con esfuerzo puede dificultar la comprensión global del texto.
🔹 Letras y números en movimiento: algunas personas describen la sensación de que las letras "bailan" o se mueven en la página.
🔹 Problemas en la memoria de trabajo verbal: recordar secuencias de letras o instrucciones escritas puede ser más difícil.
🔹 Dificultades en orientación y lateralidad: pueden tener problemas para distinguir izquierda y derecha o recordar la direccionalidad en la escritura.
🔹 Dificultades de coordinación y estabilidad postural: algunas personas con dislexia pueden presentar torpeza motriz, problemas de equilibrio o dificultades en la coordinación ojo-mano, lo que puede influir en su escritura y en otras actividades motoras finas y gruesas.
¿Cómo podemos ayudar?
Orientaciones para el apoyo a la dislexia
Existen muchas estrategias que pueden facilitar el aprendizaje y mejorar la experiencia de lectura y escritura de las personas con dislexia:
✅ Uso de letra clara y adaptada: Evitar fuentes con adornos y optar por tipografías como Arial, Verdana o OpenDyslexic.
✅ Refuerzo multisensorial: Combinar lo visual, auditivo y kinestésico en el aprendizaje de la lectoescritura.
✅ Uso de audiolibros y textos en formato digital: Facilitar el acceso a la información sin depender exclusivamente de la lectura.
✅ División de textos en fragmentos más pequeños: Facilita la comprensión y evita la fatiga cognitiva.
✅ Enseñanza estructurada y explícita de la conciencia fonológica: Trabajar el reconocimiento de sonidos y su asociación con letras.
✅ Uso de organizadores gráficos y esquemas visuales: Ayuda a estructurar la información y mejorar la comprensión.
✅ Evitar la sobrecarga de lectura y escritura: Buscar formas alternativas de evaluar conocimientos, como respuestas orales o proyectos visuales.
✅ Apoyo emocional: Fomentar la autoestima y reforzar el esfuerzo, no solo el resultado.
📌 Recuerda: La dislexia no desaparece con la edad, pero con el acompañamiento adecuado, las personas con dislexia pueden desarrollar estrategias eficaces y alcanzar su máximo potencial. Además, cada persona con dislexia es única y puede presentar un conjunto distinto de características. La intervención personalizada es clave para potenciar sus fortalezas y minimizar las dificultades.
❌ Mito 1: La dislexia es un problema de visión
✅ Realidad: La dislexia no está relacionada con problemas en la vista. Es una dificultad en el procesamiento del lenguaje que afecta la forma en que el cerebro reconoce y trabaja con los sonidos del habla y las letras.
❌ Mito 2: La dislexia solo afecta la lectura y la escritura
✅ Realidad: Aunque la dificultad principal está en la lectoescritura, la dislexia también puede afectar la memoria de trabajo, la organización, la orientación espacial y la capacidad de recordar secuencias.
❌ Mito 3: Los niños con dislexia son menos inteligentes
✅ Realidad: La dislexia no está relacionada con la inteligencia. Muchas personas con dislexia tienen habilidades excepcionales en otras áreas como la creatividad, el pensamiento visual o la resolución de problemas.
❌ Mito 4: La dislexia se supera con esfuerzo y más lectura
✅ Realidad: La dislexia es una condición neurobiológica, por lo que no se "cura". Sin embargo, con intervenciones adecuadas y estrategias personalizadas, los niños y adultos con dislexia pueden desarrollar habilidades lectoras y compensar sus dificultades.
❌ Mito 5: La dislexia es poco común
✅ Realidad: Se estima que entre el 5% y el 10% de la población tiene dislexia en algún grado. Es una de las dificultades de aprendizaje más frecuentes.
❌ Mito 6: Las personas con dislexia ven las letras al revés
✅ Realidad: Aunque algunas personas con dislexia pueden confundir letras con formas similares (como “b” y “d”), no es un problema de visión ni una inversión automática de letras. Se trata de una dificultad en el reconocimiento y procesamiento del lenguaje escrito.
❌ Mito 7: Si un niño confunde letras, tiene dislexia
✅ Realidad: Todos los niños pueden cometer errores al escribir y leer cuando están aprendiendo. La dislexia se diagnostica cuando estas dificultades persisten más allá de la edad en la que se espera su superación y afectan significativamente el aprendizaje.
❌ Mito 8: Solo los niños tienen dislexia
✅ Realidad: La dislexia no desaparece con la edad. Los adultos con dislexia han aprendido estrategias para compensar sus dificultades, pero muchos siguen enfrentando desafíos en la lectura, escritura y procesamiento del lenguaje.
Preguntas frecuentes sobre la dislexia
❓ ¿Cómo se diagnostica la dislexia?
El diagnóstico de la dislexia debe ser realizado por un equipo multidisciplinar, incluyendo psicopedagogos, orientadores educativos y especialistas en dificultades del aprendizaje. Se utilizan pruebas como DST-J y Prolexia, donde se realizan pequeñas pruebas de lectura, escritura, memoria de trabajo, procesamiento fonológico, acceso al léxico, coordinación y estabilidad postural, para evaluar las dificultades y el riesgo de presentar dislexia. Es esencial valorar a nivel cualitativo también las dificultades que se observan en el día a día, tanto en el aprendizaje como en su autonomía y en su conducta adaptativa.
❓ ¿Qué tipo de apoyo necesitan los niños con dislexia?
Los niños con dislexia necesitan adaptaciones metodológicas en el aula, métodos de enseñanza multisensorial y en algunas ocasiones el apoyo de especialistas en pedagogía terapéutica. Por otro lado, puede ser positivo en algunos casos la utilización de tecnología asistida como audiolibros o programas de lectura.
❓ ¿Puede un niño con dislexia aprender a leer bien?
Sí, con la intervención adecuada y esfuerzo, los niños con dislexia mejoran significativamente su capacidad lectora y habilidad de escritura, así como la coordinación y orientación espacial. Conforme van creciendo y conociendo su manera particular de aprender, pueden desarrollar estrategias compensatorias que les permitan comprender y acceder a la información escrita y mejorar cualquier habilidad que tengan afectada de alguna manera.
❓ ¿La dislexia tiene cura?
No es una enfermedad, por lo que no tiene cura. Sin embargo, con un buen apoyo y estrategias adecuadas, las personas con dislexia pueden aprender a manejar sus dificultades y desarrollar todo su potencial.
Conclusión
La dislexia es una condición neurodivergente, no es una enfermedad. Con el apoyo adecuado, no tiene por qué limitar el aprendizaje ni el desarrollo de una persona. Romper con los mitos y ofrecer información veraz es el primer paso para construir una educación más inclusiva y equitativa.
¿Conoces algún otro mito sobre la dislexia? ¡Juntos podemos dar visibilidad a la diversidad en el aprendizaje!